Activistas veganos protestaron en La Rural y los expulsaron en medio de silbidos del público
Se produjo un momento tenso en la tradicional exposición agropecuaria cuando manifestantes exhibieron carteles con leyendas como “Rechazo al especismo” y “Holocausto animal”
En pleno mediodía del domingo, en la pista central de la Exposición Rural de Palermo, un grupo de aproximadamente 15 activistas veganos ingresó sorpresivamente mientras se desarrollaba el concurso de carruajes, a pocos minutos de que se anunciara la premiación. Con pancartas en mano y consignas escritas en grandes letras, lograron interrumpir la actividad por algunos instantes antes de ser retirados del lugar por la Policía. Desde las gradas, el rechazo fue inmediato: los abucheos y gritos de “¡Fuera, fuera!”, se impusieron en el predio y marcaron el ritmo de una secuencia que, en cuestión de minutos, quedó registrada en decenas de celulares.
Los manifestantes, que habían logrado ingresar al centro de la pista sin ser detectados previamente, desplegaron más de cinco carteles de distintos tamaños. Las consignas incluían frases como “Rechazo al especismo”, “Holocausto animal”, “Derechos animales” y otras similares que apuntaban contra el uso de animales en espectáculos, concursos y remates.
En esa línea, argumentaron que la exposición “no es una fiesta” ni una celebración cultural, sino que representa lo que definieron como un “holocausto animal”.
“Exigimos la liberación animal”, señalaron los activistas al ser retirados. Y añadieron: “Son tratados como objetos”, en referencia a los animales que participan de la muestra, donde son evaluados por su capacidad de producción cárnica o su valor genético, y también subastados para distintos fines, incluidos el consumo y el engorde.
El operativo de seguridad actuó con rapidez. En menos de cinco minutos, la Policía logró retirar del lugar a los manifestantes sin que se produjeran forcejeos ni disturbios. Testigos del hecho indicaron que los activistas no ofrecieron resistencia y que fueron escoltados de manera pacífica fuera de la pista central. Durante ese breve lapso, los carteles permanecieron visibles ante el público, que no disimuló su desaprobación.