Otro femicidio se suma a la lista horrorosa en Santiago del Estero
Policía asesinó a su ex pareja, docente, con el arma reglamentaria y se quitó la vida delante de su hijo. El testigo tiene escasos 7 años. Vio cuando su padre ultimó de un disparo a su madre y se suicidó. Aterrado, salió corriendo hacia la calle y anoche recibía contención.
Un funcionario policial asesinó ayer a su ex pareja, maestra jardinera, asestándole un disparo con su arma reglamentaria y luego se quitó la vida de un tiro en la cabeza, ante la mirada aterrada del hijo de ambos de apenas 7 años.
El escenario fue una vivienda ubicada a la vera de la ruta nacional Nº 9 del Bº El Tala, en la ciudad de Ojo de Agua, según la investigación que coordinaba anoche la fiscal de Género, Lucía González Farías, junto a personal de las divisiones Criminalística y Homicidios y Delitos Complejos de Capital.
La víctima es Micaela Corvalán, maestra que cumplía funciones en el Jardín Las Ardillitas. El agresor, su ex pareja Román Gutiérrez, quien trabajaba en la Seccional local Nº 31.
Los testigos revelaron que hasta hace un mes atrás, la pareja convivía en la casa de una abuela del efectivo. Sin embargo, ella puso fin a la relación y alquilaba en el escenario del horror.
Testigos dijeron que anteanoche Corvalán y Gutiérrez fueron vistos en el festival que se realizó en Ojo de Agua.
No hay testigos, pero la hipótesis es que el funcionario insistía en que la docente retornase a su lado y como ello no se produjo y el femicida concretó el asesinato en la tarde de ayer.
A las 16.55 de ayer, un inquilino riojano que vive a la par, escuchó dos disparos. Avisó a la policía, a los diez minutos, una comisión de efectivos arribó a la vivienda y se encontró con una escena terrorífica. En el comedor-cocina yacía sin vida la maestra y a su lado, el policía Gutiérrez. A cinco centímetros del femicida, se pudo ver su arma reglamentaria: una pistola 9 mm.
Un conmocionado testigo
El femicidio y posterior suicidio tuvieron un testigo, cuya situación golpeó fuerte anoche a los policías y a la fiscal. Se trata de un niño de 7 años hijo de la maestra y del uniformado. El menor había visto el triste fin de su madre y el suicidio de su padre y al instante salió corriendo hacia la nada.
Urgente, la fiscal dispuso proteger la escena y que nadie la contaminase. Antes de las 19, la comisión de Capital arribó a Ojo de Agua y trabajó hasta bordear la medianoche.
Cerca de las 23, los dos cuerpos fueron ascendidos a vehículos para sendas autopsias a realizarse a primera hora de hoy, adelantaron los voceros policiales. La vivienda era custodiada por los policías, quienes incautaron el arma de fuego y otras pruebas cruciales para la investigación.
La noticia causó profundo dolor en la comunidad de Ojo de Agua, e indignación por el hecho en el que el principal protagonista del horror fue un funcionario policial.
Contención familiar y psicológica para el niño
El pequeño sobreviviente esta madrugada recibía contención entre sus tías y en los psicólogos, por disposición de la fiscal González Farías.
Todo era desolación y la funcionaria priorizaba la obtención de pruebas científicas, ya que de ellas depende el cierre de una historia trágica que también incluirá el testimonio de familiares, vecinos y amigos de los dos protagonistas. se supo en Ojo de Agua.
Otro aspecto importante era el secuestro de los celulares. Para los policías y la fiscal, quizá obtendrán respuestas de lo hecho en las últimas 72 horas.
Finalmente, hoy la fiscal aguardará las conclusiones de las autopsia y luego autorizará la entrega de los cuerpos para el último adiós y sepultura.
El efecto destructor de un proyectil letal de una 9 mm
Los médicos habrían establecido anoche que la docente recibió el disparo por la zona media del costado izquierdo, entre la axila y las costillas, con entrada y salida. Todo indicaba que el proyectil causó daños irreversibles, en especial en los pulmones. Los especialistas juzgaron que la víctima dejó de existir desangrada.
Debido a la potencia y el efecto destructor de una bala de una pistola 9 mm, los funcionarios deslizaron que no fue una agonía prolongada, sino un desenlace rápido.
En tanto, él habría llevado la pistola a la cabeza, abrió fuego y habría dejado de existir casi en el acto, sentenciaron los especialistas. Las autopsias será hoy, temprano, y las conclusiones luego serán giradas a la fiscal.