Se baja Vidal de la presidencia
María Eugenia Vidal se reunió con Macri para confirmarle que no será candidata a presidenta. El expresidente ratificó su apoyo a Jorge Macri en la carrera por la sucesión de Horacio Rodríguez Larreta.
Pese a los últimos gestos de unidad, el enfrentamiento entre los jefes de Pro por el armado electoral en la ciudad de Buenos Aires permanece abierto. Cuando restan menos de dos meses para el cierre de listas, el partido fundado por Mauricio Macri se encamina a la contienda electoral en el distrito que gobierna desde 2007 en un clima incierto. Antes de viajar al exterior, el expresidente envió señales de que no prevé modificar sus planes en la fortaleza de Pro, donde impulsa la candidatura de su primo, Jorge, en la disputa por la sucesión de Horacio Rodríguez Larreta.
Lo mismo piensa Patricia Bullrich, otro sostén de la postulación del intendente de Vicente López en uso de licencia. Así, comenzó a disiparse la chance de que María Eugenia Vidal, promovida por el larretismo y distintos sectores de la fuerza, se convierta en una suerte de prenda de unidad de Pro para evitar que el radicalismo le arrebate al macrismo su bastión.
El sábado pasado, horas después de la reunión cumbre de la cúpula de Pro, Macri recibió a solas a Vidal en su quinta familiar de Los Abrojos. La exgobernadora bonaerense había pautado una audiencia con el expresidente para comunicarle su decisión. Según fuentes al tanto de la conversación, Vidal le confirmó a Macri que no buscará disputar la Presidencia este año, una definición que podría dar a conocer públicamente en los próximos días u horas.
En el entorno de la diputada nacional aseguran que, en su anuncio, Vidal solo manifestará las razones por las que desiste de una postulación presidencial. Por lo tanto, remarcan, no se pronunciará respecto a la posibilidad de respaldar a Larreta o a Bullrich en la compulsa por la candidatura de Pro ni expresará su intención de sumarse a la competencia por la sucesión del jefe porteño. Cerca de la exmandataria bonaerense repiten que ella ha dicho en reiteradas ocasiones durante los últimos meses que no contempla la idea de volver a la Ciudad.
Lo cierto es que Vidal solo evaluaría esa alternativa en caso de que haya un acuerdo entre Macri, Larreta y Bullrich para que sea la candidata única. Sería una forma de destrabar la negociación y evitar una división del principal partido opositor que ponga en riesgo su hegemonía en el distrito. Ese planteo llegó a los oídos de Macri. Entre los discípulos del expresidente en Pro acusan a Larreta de instalar la hipótesis del nuevo plan “V” para salir de la encerrona en que quedó atrapado desde que sacó a la cancha tres candidatos propios para desafiar a Jorge Macri, bendecido por su exmentor y Bullrich. De ese trío solo queda en pie Fernán Quirós, tras la reciente baja de Soledad Acuña, a quien Larreta propone ahora como compañera de fórmula del ganador de la interna de JxC.
Macri hubiera alentado una candidatura de Vidal para suceder a Larreta en otro contexto, pero, a esta altura, no prevé retirarle su respaldo a su primo. Es que si la exgobernadora hubiese manifestado su deseo de competir por la jefatura porteña después de las legislativas de 2021, el fundador de Pro la habría ungido. Ahora, remarcan fuentes cercanas a Macri, no alterará su estrategia por los errores tácticos y políticos que, considera, cometió Larreta durante el último año. Por caso, entre los macristas paladar negro machacan con que fue el jefe porteño quien promovió el desembarco de Jorge Macri en su Gabinete y aceptó la opción de que compita.
Pese a los intentos de Larreta de fortalecer a Quirós, los laderos de Macri consideran que el jefe porteño terminará aceptando la candidatura del ministro de gobierno porteño. Apuestan a que caiga por su propio peso. “Estamos en un punto de no retorno”, afirman quienes rodean a Macri. Incluso trazan un paralelismo con los tironeos por la postulación presidencial de Bullrich, que el larretismo se resistía a admitir.
La falta de articulación entre los altos mandos de la fuerza para destrabar el esquema electoral de la ciudad inquieta a las primeras y segundas líneas del partido creado por Macri. Temen que la fragmentación en Pro incremente las chances de un triunfo de la UCR en las urnas. “En esta lógica de ‘el que cede, pierde’, va a ganar Lousteau”, desliza uno de los jefes de la fuerza. En el comando de campaña de Jorge Macri niegan que el funcionario porteño sea menos competitivo que Vidal en la ciudad e insisten en que supera con amplitud a Quirós en los sondeos que analizan. “Los números a Jorge le dan. Esa hipótesis no va”, sostienen. Saldrá a cazar los votos que podrían cosechar Javier Milei y Ricardo López Murphy.
A pesar de que en el larretismo mantienen un destello de esperanza de que acepte competir por la Ciudad, una jugada que le permitiría al jefe porteño destrabar el esquema porteño, Vidal sigue enfocada en reposicionarse en el tablero nacional. De hecho, viajó el martes a Misiones para apoyar a los candidatos locales de JxC antes de los comicios del domingo. Y la semana que viene irá a Tierra del Fuego y Tucumán.